Los procedimientos cosméticos están creciendo, pero un experto advierte que antes de hacerse una lipo-aspiración abdominal, un lifting facial o corregir las arrugas hay que hacer los deberes.
«Hay muchas personas realizando procedimientos cosméticos; algunas son muy habilidosas y otras, no. Los consumidores son los que deben estar atentos», dijo el doctor Jeffrey Dover, presidente electo de la Sociedad Estadounidense de Cirugía Dermatológica.
A comienzo de este mes, una noticia dio cuenta de que Tameka Foster, la esposa del cantante de R&B, Usher, sufrió un infarto durante la anestesia previa a una liposucción.
Y en noviembre del 2007, Donda West, la madre de la estrella del rap Kanye West, murió después de una reducción mamaria, una lipoaspiración abdominal y la liposucción.
La clave es consultar a un profesional con reputación, mucha experiencia «y recomendado por el médico clínico, una sociedad científica estatal o nacional, o alguien de confianza», dijo Dover.
«Creo que se debería consultarse a un especialista que sea un dermatólogo o un cirujano plástico certificado», añadió.
Antes de hacerse el procedimiento, Dover recomienda que los pacientes le hagan al profesional elegido ciertas preguntas, como ¿cuánto tiempo hace que se dedica a realizar este procedimiento?, ¿dónde se entrenó?, ¿qué sociedad lo certificó? y ¿cuántos de estos procedimientos realizó?
Por ejemplo, dijo Dover: «Si una persona se va a hacer un procedimiento de relleno, tiene que preguntar: ¿cuántos rellenos realizó hasta ahora? ¿Cuántos con ese mismo relleno? ¿Le molestaría si hablo antes con alguno de esos pacientes?»
«Si el profesional no responde alguna de esas preguntas o no da una buena explicación y se le pierde confianza, es momento de levantarse y salir del consultorio», agregó Dover.
Al final, indicó, lo mejor es «ser cauteloso y prudente, hacer preguntas, verificar, dudar y asegurarse de que la confianza en el profesional sea total».
«Un aviso en el diario o una revista no significa que el profesional sea bueno. Muchos pacientes no distinguen un artículo periodístico de un aviso publicitario», expresó Dover.
El experto recomienda no tomar una decisión a partir del precio, ya que un procedimiento médico no es ir de compras. «Se tiene una cara y hay que tratarla con respeto. No negociaría el precio, sino la calidad», finalizó Dover.