Un nuevo estudio dirigido por el Dr. Adrian Barnett y su grupo de investigadores de la Universidad de Tecnología de Queensland en Australia y la Universidad Noruega de Ciencias y Tecnologías en Trondheim, sugiere que los factores ambientales pueden ser una causa que contribuye a los resultados adversos del nacimiento, como nacimiento prematuro y muerte fetal.
Los investigadores examinaron la relación entre la temperatura ambiental y el nacimiento prematuro y la muerte fetal en Brisbane Australia, entre 2005 y 2009. Durante este periodo se registraron un total de 101.870 nacimientos, de los cuales el 0,6% fueron muertes fetales, los investigadores usaron un modelo de riesgos proporcionales de Cox con el nacimiento vivo y la muerte fetal como riesgos competentes, comparando la temperatura, humedad, y niveles de polución del aire registrados semanalmente para cada embarazo.
Los resultados mostraron que las temperaturas ambientales más altas en las últimas cuatro semanas del embarazo aumentaron el riesgo de muerte fetal, los riesgos más bajos estuvieron en las semanas más frías, y las temperaturas medias con medias semanales de 23 °C fueron solo tan peligrosas como las semanas más cálidas. El índice de riesgo para muerte fetal fue 0,3 a 12 °C, en relación con la temperatura de referencia de 21 °C; el efecto de la temperatura fue mayor a menos de las 36 semanas de gestación.
Los investigadores también encontraron una asociación entre la temperatura más alta y la gestación más corta, con un índice de riesgo para muerte fetal de 0,96 a 15 °C y 1,02 a 25 °C. Este efecto fue mayor a edades gestacionales tardías. El estudio fue publicado en la revista American Journal of Epidemiology.
Los aumentos en la temperatura aumentaron el riesgo de muerte fetal, y esto fue particularmente real en las etapas tempranas del embarazo antes de las 28 semanas, comenta el Dr. Barnett, se sabe que las mujeres deben evitar los baños calientes o Jacuzzis durante el embarazo puesto que puede causar una terminación del embarazo, y la deshidratación causada por el estrés del calor y la sudoración puede ser peligrosa para el feto e induce el parto.
Los bebés nacidos antes de la 37ª semana de gestación son prematuros, el riesgo de complicaciones aumenta cuando nace el bebé, incluyendo pulmones inmaduros, neumonía, apnea, bradicardia, ictericia, parálisis cerebral, hemorragia intraventricular, un sistema digestivo y gastrointestinal inmaduro, ductus arterioso persistente, anemia, retinopatía de la pre-madurez, enterocolitis necrotizante, sepsis, y varias infecciones.
Fuente: American Journal of Epidemiology.