El colombiano Carlos Arango se declaró hoy culpable en la ciudad de Nueva York de haberse hecho pasar por cirujano plástico para realizar procedimientos quirúrgicos que dejaron permanentemente desfiguradas a varias mujeres, por lo que pasará seis meses en la cárcel además de pagar indemnizaciones.
Así lo anunció hoy el fiscal general del estado de Nueva York, Eric Schneiderman, quien declaró que Arango atraía a pacientes desprevenidas con bajos precios para procedimientos médicos muy complejos, poniendo su propia codicia por encima de la salud y la seguridad de sus víctimas.
Arango admitió ante la jueza Dorothy Chin-Brandt, del tribunal superior de Queens, que, pese a no tener licencia para ello, realizó entre abril y diciembre del año pasado múltiples cirugías cosméticas, como liposucciones, en una clínica de Stamford (Connecticut) y otras dos en Nueva York.
El colombiano, será sentenciado oficialmente el próximo 8 de noviembre, llegó a un acuerdo para pagar 8.700 dólares a sus víctimas, algunas de las cuales quedaron desfiguradas, así como a pasar seis meses en prisión y otros cinco años en libertad condicional.
El fiscal Schneiderman acusó en abril pasado a Arango junto a William Ordóñez, otro falso cirujano plástico que está prófugo y a Marlon Castillo, también colombianos, de haber realizado procedimientos quirúrgicos sin anestesia general y para los cuales no tenían licencia.
Ni Arango ni Ordóñez contaban con licencias para practicar la medicina en los estados de Nueva York o Connecticut, y Castillo, quien sí es médico con licencia para la práctica en Nueva York, Connecticut y California, no estaba certificado como cirujano plástico.