Investigadores de la Universidad Rovira i Virgili en Cataluña, España, han desarrollado un tejido inteligente que diagnostica el estado de la salud de la persona que lo viste gracias a un tinte de nanotubos de carbono que convierte a la pieza de ropa en un conductor eléctrico capaz de detectar sustancias químicas.
Según informa la Universidad Rovira i Virgili, el investigador Francisco Andrade, del grupo de investigación de Quimiometría, Cualimetría y Nanosensores, quien es líder del proyecto que convierte las fibras textiles en detectores de sustancias químicas y aportan datos sobre el estado de salud, también con aplicaciones para usos deportivos.
El tejido bañado en un tinte de nanotubos de carbono detecta las sustancias químicas presentes en fluidos corporales (como sudor u orina) y las transforma en señales eléctricas que se pasan a una computadora o en cualquier dispositivo móvil inteligente para que las interprete al médico o al usuario.
En un plazo de tres y cuatro años, se podrán encontrar en el mercado prendas de ropa interactivas.
El método es rápido, sencillo y económico y los investigadores han demostrado que pueden determinar muchos tipos de iones y también el pH de una forma sencilla y rápida, por lo que la ropa tratada así puede detectar propiedades de nuestro cuerpo sin darnos cuenta mediante un sistema nada invasivo.
De momento, se han probado los sensores en la ropa de un maniquí y se ha demostrado que puede detectar de forma directa la composición del sudor artificial y ahora las pruebas se realizan con tiras sensoras, mojando la camiseta del maniquí para ver cómo reacciona y transmite la información a un ordenador para analizarla.
Los investigadores confían en que estos tejidos inteligentes sean muy útiles para controlar, por ejemplo, la cicatrización de una herida o diagnosticar enseguida enfermedades como la diabetes o la fibrosis quística, que ahora se detectan muchas veces cuando ya están avanzadas.
La ropa inteligente también tiene usos deportivos, ya que la composición del sudor está relacionada con el estado metabólico del deportista.
El grupo de investigación desarrolla también sensores de creatinina que permitirán crear un pañal inteligente que mida componentes de la orina y sensores de trombina para detectar sangrados y otras bio moléculas.