El médico en infectología del Centro de Investigación Biomédica de Occidente, Dr. Alberto Villaseñor Sierra, comenta que la meningitis es una grave enfermedad que afecta principalmente a niños de 3 a 12 años.
Representa hasta 15% de las urgencias médicas en los hospitales del IMSS en Jalisco.
Esta enfermedad, afecta importantes estructuras del cerebro, y se presenta en 60% de los casos en niños ubicados en el rango de 3 a 12 años.
Debido a que sus síntomas iniciales son similares a los de otras patologías, los pequeños son llevados de manera tardía a recibir atención médica especializada, la meningitis constituye una emergencia médica sobre la que la población en general debe tener mayor conocimiento en cuanto sus signos y síntomas más característicos para que el diagnóstico y el abordaje sean oportunos.
En niños de 3 a 12 años, así como en pacientes jóvenes y adultos, la meningitis tiene datos clínicos característicos, entre los que sobresalen fiebre y dolor de cabeza intensos, acompañados por vómitos en proyectil de aparición súbita y sin previa sensación de náusea.
A diferencia de los recién nacidos en que la enfermedad no tiene mayores manifestaciones clínicas.
La meningitis es una inflamación de las capas externas del cerebro (meninges), aparece, hasta en 80% de los casos, como consecuencia de una bacteria llamada neumococo, la cual, antes de atacar el cerebro, estuvo colonizada en la región nasofaríngea (en la parte posterior de la nariz) del paciente.
La gripe como tal no es preludio de meningitis, lo más determinante es el estatus vacunal del paciente, desde este año se cuenta con la vacuna antineumocóccica trecevalente (sustituye a la heptavalente), que en el caso de los niños protege contra los 13 serotipos más comunes de la bacteria que desencadena la patología, con lo que la protección es muy alta, de entre 85% y 90%.
Cuando un paciente con meningitis llega a recibir atención médica, han transcurrido horas e incluso días que son vitales para garantizar los buenos resultados del tratamiento, el cual en pre escolares, escolares, jóvenes y adultos suele administrarse durante 10 a 14 días
Si el paciente es tratado en las primeras horas de inicio de la enfermedad, tiene altas probabilidades de una buena evolución clínica, si desafortunadamente llega después de tres o cuatro días, aún el mejor de los tratamientos no garantizará resultados ni para la función ni para la vida.
Se traduce en secuelas motoras, crisis convulsivas permanentes, parálisis cerebral, y en 5% a 10% de los casos, el paciente fallecerá.
Cumplir con los esquemas de vacunación, es importante que la gente aprenda a reconocer los signos y síntomas ya descritos, para que ante cualquiera de ellos acuda de inmediato al médico e iniciar el tratamiento correspondiente.
