En Francia y en varios países de Europa y América Latina, crece el escándalo por los miles de implantes de mama de mala calidad fabricados por una empresa francesa con silicona industrial, peligrosa para la salud y que fueron colocados a mujeres de varios continentes.
Estos implantes son riesgosos para la salud porque pueden romperse. A Francia le costará 60 millones de euros el gasto de retirarlos dentro de los próximos meses.
En Brasil ya fueron prohibidos los implantes mamarios denominados prótesis PIP, empresa que quebró en el 2010. Su dueño, Jean Claude Mass, confesó que utilizó silicona no autorizada para fabricar dichos implantes de mama a fin de bajar costos. Hay varias demandas en su contra.
Hoy se informó que este hombre participa en otra empresa que exporta prótesis de mama de mala calidad a América Latina.
Fuente: Noticieros Televisa