Los hombres que no tienen hijos tienen más riesgo de morir de enfermedades cardiovasculares que los que sí tienen hijos, revela un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford, EUA a cargo del Dr. Michael Eisenberg.
La investigación estudió a 135.000 hombres pensionados, de una edad promedio de 62 años, durante un período de 10 años.
El objetivo del estudio fue investigar si el número de hijos que tiene un hombre, su fertilidad o infertilidad, tienen algún impacto en su salud a largo plazo.
Los resultados mostraron un vínculo entre el estatus de paternidad y el riesgo de trastornos cardiovasculares. El estudio se publicó en la revista Human Reproduction.
El estudio, es el más amplio que se ha hecho sobre la relación entre la paternidad y las enfermedades cardiovasculares.
Y para poder comparar con precisión la fertilidad o infertilidad de los individuos sólo se incluyó en el estudio a hombres que estaban o habían estado casados.
También se excluyó del estudio a hombres que tenían un historial previo de distintas enfermedades, incluidas enfermedad del corazón, enfermedad cererbovascular u otros trastornos asociados.
Posteriormente se comparó la información con el número de hijos que los hombres habían tenido, y en el análisis estadístico se tomaron en cuenta factores como índice de masa corporal, niveles de actividad física, uso de tabaco y alcohol, raza, edad, ingreso promedio y educación.
En los 10 años que duró el estudio murieron cerca de 10% de los hombres y una de cada cinco de esas muertes pudo ser atribuida a enfermedades cardiovasculares, los resultados revelaron que en general, el riesgo de morir era más alto entre los hombres sin hijos.
Los hombres que no tenían hijos, dice el estudio, mostraron 17% más probabilidad de haber muerto de una enfermedad cardiovascular que los padres.
La asociación encontrada entre el estatus de paternidad y el riesgo de muerte cardiovascular plantea la interrogante de si existe una causa biológica subyacente a esta asociación.
Estudios pasados han mostrado que los hombres con niveles más altos de testosterona tienen más probabilidad de encontrar pareja y tener hijos.
Quizás, un nivel bajo de testosterona no sólo predispone al hombre a tener menos hijos sino también podría causar otros problemas que conduzcan a un mayor riesgo futuro de trastornos cardiovasculares.