El primer actor, Gonzalo Vega, ofreció una conferencia de prensa para aclarar que los médicos le dieron un primer diagnóstico erróneo. Había sido diagnosticado de cáncer y lo que en realidad tiene es un síndrome mielodisplásico.
Los síndromes mielodisplásicos son un grupo de trastornos caracterizados por una o más deficiencias de células de la sangre periférica secundarias a la disfunción de la médula ósea. El síndrome puede surgir de repenteo de manera secundaria después de tratamiento con quimioterapia o radioterapia, o ambos, para otras enfermedades.
La mielodisplasia secundaria generalmente tiene un pronóstico más precario que la mielodisplasia primaria. El pronóstico está directamente relacionado con el número de células blásticas de la médula ósea y con el grado de deficiencia de células de la sangre periférica.
Los síndromes mielodisplásicos se transforman en leucemia mieloide aguda (cáncer de la sangre) en cerca de 30% de los pacientes después de varios intervalos de diagnóstico. La transformación leucémica aguda es mucho menos sensible a quimioterapia que la leucemia mieloide aguda que no está relacionada con los síndromes mielodisplásicos.
El pronóstico también está relacionado con el tipo de síndrome mielodisplásico. El tratamiento consiste primordialmente en tratamiento complementario. El uso de transfusiones de plaquetas (células relacionadas con la coagulación) y sangre puede prevenir o retrasar el exceso de hierro, e influir favorablemente el pronóstico.