Estar mentalmente exhausto puede perjudicar el desempeño físico de una persona, un hallazgo que explicaría por qué a veces es tan difícil ejercitar, indicaron investigadores británicos.
Los autores dijeron que las personas que hacían tareas mentalmente agotadoras justo antes de realizar actividad física se extenuaban mucho más rápido que cuando estaban psíquicamente relajadas.
La fatiga mental no afectaba el desempeño cardíaco o muscular, sino la «percepción del esfuerzo», dijeron Samuele Marcora, Walter Staiano y Victoria Manning, de la Bangor University en Gales, en Journal of Applied Physiology.
«Nuestro estudio brinda evidencia experimental de que la fatiga mental limita la tolerancia al ejercicio en los humanos a través de una percepción del esfuerzo más elevada», escribió el equipo.
Para el estudio, los investigadores tomaron a 16 personas un examen demandante de 90 minutos en los que se requería mucha atención y memoria y que dejaba a los participantes cansados y desganados.
Luego, las personas ejercitaron en una bicicleta hasta estar exhaustos, mientras los expertos evaluaban sus pulsaciones y otros signos vitales.
Otro día, el mismo grupo simplemente miró una película documental de 90 minutos de duración y luego anduvo en bicicleta.
Los investigadores hallaron que los participantes dejaron de ejercitar un 15 por ciento antes en promedio cuando estaban mentalmente agotados, aún cuando había poca diferencia en su función cardiorrespiratoria y muscular.
«Esto brinda fuerte evidencia de que el funcionamiento cerebral puede limitar la resistencia (física) en el corto plazo», escribieron los autores.
El equipo señaló que el próximo paso es observar el cerebro para detectar exactamente qué personas con fatiga mental perciben que el ejercicio será más difícil.