La conjuntivitis es la inflamación de la capa más superficial del ojo, que recubre la cara interna de los párpados y la parte blanca del ojo llamada esclerótica.
La forma más común es la conjuntivitis catarral, bacteriana y viral. Los recién nacidos pueden ser infectados por bacterias en la vía del parto, se denomina oftalmia neonatal y se debe tratar de inmediato para preservar la visión del bebé
Una conjuntivitis se presenta en cualquier edad durante la infancia, los principales síntomas son: ojo rojo, leve edema en el párpado, la secreción que puede ser purulenta (amarillo verdosa) en las bacterianas o líquida en las virales.
En los bebés la conjuntivitis puede deberse a una obstrucción de la vía lagrimal, que es cuando el conducto que lleva las lágrimas y desemboca en la nariz, se encuentra obstruido. Se trata de niños que presentan lagrimeo y desarrollan conjuntivitis de repetición. En estos casos se espera hasta los 6 meses de vida y si el cuadro no se resolvió espontáneamente, se procede al sondaje lagrimal (destapar el lagrimal).
Hasta tanto se define el sondaje, la conjuntivitis se trata con colirios antibióticos.
En algunos casos, se puede producir una dacriocistitis que es la infección del saco lagrimal, con edema y enrojecimiento en la zona entre el ojo y la nariz. Este cuadro puede requerir hospitalización para su tratamiento con antibióticos endovenosos.
Otra forma de conjuntivitis frecuente en los bebés, es la conjuntivitis seudomembranosa, de origen bacteriano o viral. Se produce porque la secreción se deposita en la cara interna del párpado y forma una capa que se adhiere a la conjuntiva.
En este caso el niño presenta leve edema de párpados y la conjuntivitis no responde al tratamiento habitual con gotas. Se debe revertir (dar vuelta) el párpado y se procede a extraerlas con un hisopo.
La conjuntivitis epidémica por adenovirus es un tipo de conjuntivitis viral, que se asocia a fiebre. Es un cuadro unilateral, con mucha fotofobia y sensación de cuerpo extraño y presenta además un ganglio preauricular (delante de la oreja). Puede presentarse en cualquier momento de la infancia.
En niños en edad escolar puede verse la conjuntivitis alérgica (conjuntivitis papilar), cuando se revierten los párpados, se ven unas formaciones (papilas) sobreelevadas y redondeadas que son sumamente molestas y causan intensa fotofobia y lagrimeo. Es un cuadro, que tiende a repetir.
La molestia que genera la conjuntivitis viral o bacteriana se puede aliviar con la aplicación de compresas tibias (paño limpio empapado en agua tibia) en los ojos cerrados.