Los accidentes fatales tienen una ruta marcada de jueves a domingo en México, donde el consumo de alcohol combinado con conducir a alta velocidad causa 70% de las muertes en accidentes de tránsito entre la población de 15 a 30 años. Esto significa que 27,000 personas en el país pierden la vida por este motivo,
La Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) indica que la cerveza es la bebida favorita de la población mexicana, mientras que los destilados, el vino y bebidas preparadas son preferidos por los jóvenes de entre 18 a 29 años.
La bebida inicial, causante del desarrollo del alcoholismo en 5% de la población joven, es la cerveza, el patrón de consumo es alarmante. Cifras oficiales indican que casi 30 millones de mexicanos de entre 12 y 65 años ingieren bebidas alcohólicas con una frecuencia de al menos ocho veces al mes, e incluso a diario.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en promedio se atienden 46 mil casos clínicos de ingesta en estado de crisis, y por distintos grados de intoxicación, aproximadamente 125 diarios.
Las autoridades de seguridad pública afirman que al año cerca de 50% de las personas que cometieron algún delito estaban alcoholizadas, mientras que alrededor de 30% de la población que ingresó a los Consejos Tutelares para Menores cometió alguna infracción en esas condiciones.
En la actualidad es común entre la población joven la combinación de alcohol y sustancias como la marihuana, la cocaína o el éxtasis. De estas otras drogas también se ha descrito que alteran el funcionamiento del cerebro, mermando la capacidad de atención, memoria y funciones ejecutivas de forma similar al alcohol. En algunos casos estos efectos permanecen incluso tras un año de desintoxicación, lo que nos debe llevar a reflexionar sobre el potente daño cerebral que ocasionan y la necesidad de compensar esa alteración cognitiva con programas específicos para su recuperación.
