Los estudiantes que tratan de compensar la falta de sueño el fin de semana, rinden menos en los test de atención en la escuela.
Un equipo encabezado por el Dr. Seog Ju Kim, de la Universidad de Medicina y Ciencia de Gachon, en Incheon, Corea del Sur asegura que los resultados sugieren que la «deuda de sueño» acumulada durante la semana reduciría los recursos intelectuales de los adolescentes.
Son como un banco: siempre están sobregirados opina el Dr. David Gozal, experto en trastornos infantiles del sueño de la University of Chicago.
Los 2.600 estudiantes coreanos estudiados dormían en promedio 5,42 horas por día de lunes a viernes. El fin de semana, sumaban casi tres horas de sueño, según cuestionarios.
Los jóvenes que dormían de más los fines de semana rendían menos en las tareas computarizadas de atención durante la clase, señala el equipo del Seog Ju Kim. el estudio se publicó en la revista Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine.
La atención y la función ejecutiva son el primer paso para el éxito académico, hay suficientes pruebas de que la necesidad de dormir no se puede pasar por alto.
Según el Instituto Nacional del Corazón de EUA, los niños y los adolescentes deben dormir por lo menos nueve horas por noche, aunque algunos pueden dormir menos, estamos en una sociedad muy influida por el rendimiento académico, un adolescente que necesita compensar la falta de sueño el fin de semana, pone en riesgo su rendimiento académico.
Fuente: Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine
