Las mujeres que sufren violencia doméstica presentan patrones distintivos de lesión facial, informan investigadores de EE. UU.
Los hallazgos podrían ayudar a los trabajadores de atención de la salud a identificar a las víctimas de violencia por parte de sus parejas íntimas, añadieron.
La Dra. Oneida A. Arosarena y sus colegas de la Facultad de medicina de la Universidad Temple de Filadelfia revisaron los expedientes médicos y dentales de 326 mujeres (de edad promedio de 35 años) tratadas por trauma facial. De las 45 pacientes que fueron víctimas de asalto (el 13.8 por ciento), 18 eran víctimas documentadas de abuso doméstico, mientras que 24 de las 26 restantes víctimas de asalto no podían identificar a sus atacantes o no lo hicieron.
Otras causas comunes de lesiones faciales entre las mujeres en el estudio incluían choques de vehículos (42.6 por ciento), caídas (21.5 por ciento) y causas no conocidas o no documentadas (10.7 por ciento).
Los investigadores encontraron que el asalto se asociaba típicamente con fracturas de la mandíbula, fracturas complicadas de los pómulos (fracturas cigomáticas complejas), fisuras o fracturas en los huesos que rodean a los ojos (fracturas del suelo orbital), y lesión cerebral.
«Específicamente, se encontraron más fracturas zigomáticas complejas, fracturas del suelo orbital y lesiones intracraneales de las esperadas en la violencia de pareja íntima», escribieron los autores del estudio. «Las víctimas de asalto por asaltantes desconocidos o no identificados eran más propensas a presentar fracturas de mandíbula que otras víctimas de asalto».
El estudio aparece publicado en la edición de enero y febrero de la revista Archives of Facial Plastic Surgery.
Entre el 88 y el 94 por ciento de las víctimas de violencia doméstica buscan atención médicas por lesiones en la cabeza y el cuello, y 56 por ciento de ellas tenían fracturas faciales.
«Debido a que la violencia de pareja doméstica es responsable por el 34 al 73 por ciento de todas las lesiones faciales en las mujeres, los cirujanos plásticos y otros proveedores de atención de salud que tratan a pacientes de lesiones maxilofaciales están en una posición única para identificar a estas víctimas y referirlas a los programas locales de servicios de violencia doméstica para planificación de seguridad, información y referencias, servicios de respaldo y defensoría, dependiendo de las necesidades y elecciones de las víctimas», escribieron los investigadores.