Los pacientes con esclerosis múltiple con enfermedad progresiva crónica tienen más probabilidad de buscar el tratamiento controversial de venoplastia cerebroespinal, según nuevo un estudio encabezado por la Dra. Ruth Ann Marrie de la Universidad de Manitoba en Winnipeg, Canadá.
Los investigadores analizaron los datos de un estudio observacional prospectivo de 716 pacientes con esclerosis múltiple en la provincia de Alberta, Canadá, incluyendo 141 que reportaron tener venoplastia.
El estudio revisó las características clínicas y demográficas de los pacientes y, a los pacientes que les habían practicado venoplastia se les preguntó acerca de sus experiencias y resultados. Para referencia adicional, los investigadores extrajeron datos clínicos y demográficos similares recolectados en 2006 de 1.717 pacientes con esclerosis múltiple, antes del auge de la venoplastia; las características de los dos grupos fueron casi idénticos.
Los resultados mostraron que los pacientes que reportaron que les habían practicado una venoplastia cerebro espinal para tratar laesclerosis múltiple fueron significativamente más propensos a tener formas progresivas de la enfermedad y haber vivido con la esclerosis múltiple durante al menos cinco años.
Los investigadores encontraron una tendencia débil hacia una probabilidad más baja de tratamiento de venoplastia en los pacientes con comorbilidades. La depresión fue más común, reportada en 28% de la muestra total; colesterol alto, hipertensión, y migraña fueron cada uno vistos en aproximadamente 15%.
El grado de discapacidad también fue un factor significativo, con cada grado en la escala, Etapas de Discapacidad Determinadas por el Paciente (PDDS) asociado con un aumento de 14% en la probabilidad de venoplastia.
El interés en la venoplastia cerebroespinal surgió después de que un cirujano vascular publicó un reporte describiendo una teoría llamada insuficiencia venosa cerebroespinal crónica en 2009 que decía que los pacientes con esclerosis múltiple, tenían obstrucciones en las venas que drenan el cerebro y la médula espinal superior, y que las intervenciones percutáneas para remover los bloqueos podía llevar a un alivio rápido de los síntomas de la esclerosis múltiple.