Riesgo de no vacunarse contra el sarampión

El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa y grave. De hecho es la enfermedad más contagiosa del mundo. El riesgo de no vacunarse contra el sarampión es que si estás junto a una persona enfermeda tienes más de 90 por ciento de probabilidades de contagiarte.

Transmisión y Causas

El virus del sarampión se transmite fácilmente por el aire, a través de gotitas respiratorias. Por ejemplo, si una persona infectada tose o estornuda, tú puedes inhalar el virus. También, puedes contraerlo al tocar una superficie contaminada y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca. Un aspecto crucial es que el virus puede permanecer activo en superficies hasta dos horas. Por lo tanto, la higiene frecuente de manos es esencial.

Signos y Síntomas

Inicialmente, el sarampión comienza con fiebre, tos, congestión nasal, y ojos rojos. Pocos días después, aparece la mancha blanca característica dentro de la boca, seguida por una erupción cutánea. Esta erupción suele iniciar en la cara, extendiéndose posteriormente al resto del cuerpo. La fiebre puede escalar antes de la aparición de la erupción. Es vital estar atento a estos signos para buscar atención médica temprana.

Complications

Las complicaciones del sarampión pueden ser graves, especialmente en niños pequeños y adultos mayores. Estas incluyen otitis media, neumonía, encefalitis, y una disminución en la capacidad del cuerpo para combatir otras enfermedades. La encefalitis, por ejemplo, puede causar daño cerebral permanente. Por ello, prestar atención a los síntomas y buscar tratamiento es fundamental.

Tratamiento y Prevención

No existe un tratamiento específico para el sarampión. El enfoque se centra en aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. Esto puede incluir la administración de fiebre-reductores y suplementos de vitamina A. Sin embargo, la vacunación es el medio más efectivo de prevención. La vacuna contra el sarampión es segura y eficaz, formando parte del calendario de vacunación habitual. Es parte de la llamada triple viral que incluye sarampión, rubeola y paperas. Se debe administrar al año de vida y entre los 4 y 6 de edad un refuerzo.

Importancia de la Vacuna

La vacunación no solo protege a quienes reciben la vacuna, sino que también contribuye a la inmunidad colectiva. Esto significa que cuando una proporción suficiente de la población está inmunizada, el virus tiene menos oportunidades de propagarse, protegiendo a quienes no pueden ser vacunados. Sin embargo, el escepticismo sobre las vacunas ha llevado a brotes en comunidades con bajas tasas de vacunación. Esto resalta la importancia de mantener altas tasas de vacunación para prevenir brotes y proteger a la población.

El sarampión es una enfermedad prevenible a través de la vacunación. La transmisión se da fácilmente sin la protección adecuada. Los síntomas y complicaciones pueden ser severos, pero prestar atención y actuar rápidamente puede minimizar los riesgos. La vacunación es crucial no solo para tu protección, sino también para la salud pública global. Por lo tanto, asegurarte de estar vacunado y promover la vacunación en tu comunidad es esencial para erradicar esta enfermedad.