Bendan Jensen opina que su operación es un milagro que le había restaurado la vida. 13 días después de la cirugía, sus primeras palabras fueron: «Buenos días, quiero irme a casa».
Es la primera vez que se realiza un trasplante doble de laringe y tráquea y apenas la segunda de sólo laringe.
Jensen, de 52 años, había perdido el habla tras una cirugía en 1999 que le causo daño a la laringe.