Científicos estadounidenses realizaron pruebas en ratones con degeneración retiniana en fase terminal, inyectando una molécula de acrilamida-azobenceno-amonio cuaternario en los ojos de los roedores comprobando como se restauraba sensibilidad a la luz y el comportamiento visual, devolvieron la vista a ratones ciegos al inyectar una sustancia química que los hace sensibles a la luz, según un estudio publicado en la revista Neuron, ofrecen esperanza de que un día existan tratamientos para curar las formas más comunes de ceguera, como la degeneración macular y la retinitis pigmentosa.
La sustancia empleada se llama AAQ y hace que las células de la retina se vuelvan sensibles a la luz, afirma el investigador Richard Kramer, profesor de biología celular y molecular de la Universidad de California en Berkeley.
El tratamiento es temporal y no requiere cirugía; puede ofrecer una nueva vía para restaurar la visión que no supone implantar microchips o realizar transplantes de células madres, dos de las técnicas que son investigadas.
La ventaja de esta técnica es que se trata de una simple sustancia química, lo que significa que se puede cambiar la dosis, se puede usar en combinación con otras terapias, o se puede discontinuar la terapia si no esta conforme con los resultados. No se puede hacer esto cuando se implanta un chip mediante cirugía o cuando se modifica genéticamente a alguien.
Todavía no está claro qué calidad de visión tenían los ratones, los investigadores comprobaron que la sustancia química tuvo efecto, porque las pupilas se contraían ante la luz intensa y los roedores mostraban disponer de luz. Los animales que participaron en este experimento tenían mutaciones genéticas por las cuales poco después de su nacimiento perdieron los bastones y conos de los ojos.
Es un gran avance en el campo de la restauración de la visión, comenta el coautor del estudio, Russell Van Gelder, jefe del departamento de oftalmología de la Universidad de Washington.