Una prueba de sangre podría servir de ayuda para diagnosticar la depresión, una patología que según la Organización Mundial de la Salud representa una de las principales causas de incapacidad a nivel mundial.
El Dr. John Bilello y su equipo de investigadores del Hospital General de Massachusetts en EUA, pusieron a prueba el nuevo test y explican que tradicionalmente la depresión se diagnostica a partir de los síntomas del paciente pero la eficacia del proceso presenta grandes variaciones, especialmente dependiendo de la experiencia y recursos del médico tratante.
El Dr. Bilello afirma que puede ser difícil convencer a los pacientes de la necesidad de seguir un tratamiento basándose en el cuestionario que hoy se usa para evaluar los síntomas de la depresión. Esperan que las bases biológicas de esta prueba logren que los pacientes vean a su depresión como una enfermedad tratable más que como una fuente de trauma y estigma.
Las conclusiones del estudio fueron publicadas en la revista Molecular Psychiatry.
La nueva prueba mide nueve compuestos o biomarcadores que circulan en sangre y se asocian a la respuesta corporal al estrés, con el dato de la concentración de cada uno de ellos los especialistas aplican una fórmula específica que indica la posibilidad de que el paciente esté sufriendo una depresión. La biología de la depresión sugiere que una compleja serie de interacciones existe entre el cerebro y los biomarcadores en la circulación.
El psiquiatra George Papakostas puso este sistema a prueba con dos grupo diferentes de voluntarios que incluían, en ambos casos, a personas deprimidas y otras sanas. Al analizar la eficacia del nuevo test de sangre el Dr. Papakostas notó que sirve eficientemente para diferenciar a las personas con depresión de las que no la padecen..