Al parecer ha llegado el momento en que debes dedicarle un poco menos de tiempo al gimnasio y empezar a trabajar en cultivarte y en tus modales. Sí, es cierto que los abdominales son uno de los músculos en los que ellas se fijan más, pero si tuvieran que elegir, probablemente elegirían tener al lado a alguien que les abriera la puerta del auto, las haga caminar del lado interior de la calle o que espere a que ella llegue para comenzar a comer.
Una encuesta realizada a 1500 mujeres canadienses solteras de entre 18 y 40 años descubrió que más de la mitad prefieren que un hombre sea caballero con ellas a que sean físicamente guapos o que tengan un cuerpo atractivo. Pareciera que a pesar que el feminismo sigue en la mente de la mujer moderna, la idea de ser recogidas de sus casas, que las lleven a cenar y a tomar un vino, y que los hombres paguen la cuenta, tal como se solía hacer antes que los hombres empezaran a repartir los gastos de las salidas en partes iguales.
El cortejo, entonces, no ha muerto. Está vivito y coleando en los corazones de las mujeres. Son los hombres los que tiene que entrar en acción.
¿Cuándo fue la última vez que le abriste la puerta del auto o de un restaurante a tu novia o esposa? ¿o que te pusiste de pie cuando ella abandonó o regresó a la mesa? ¿o que le pusiste tu chaqueta encima cuando tuvo frío? algunas mujeres están tan poco acostumbradas a esto que, cuando se encuentran con alguien que lo hace, lo miran extrañadas o empiezan a voltear la cabeza para ver dónde está la cámara escondida.
Pareciera que el concepto de los modales, tanto en hombres como en mujeres, se hubiera desvanecido, al menos en la vida diaria. Todo gira tan rápido, pero es mejor detenerse y marcar la diferencia: la caballerosidad puede ser el factor que te haga destacar de sus odiosos ex-novios y de la fila de patanes que la persiguen, recuerda mantenerte actualizado leyendo un poco cada día, pues la inteligencia también es un factor de atractivo.
