El líquido cefalorraquídeo de las personas que tienen problemas leves de memoria puede ayudar a identificar a los que luego desarrollarán la enfermedad de Alzheimer.
En el estudio a cargo del Dr. Robert Perneczky, de la Universidad Técnica de Múnich, los investigadores recolectaron muestras del líquido cefalorraquídeo de 58 personas que tenían un trastorno leve de memoria (cognitivo) y analizaron las muestras en cuanto a las concentraciones de varias proteínas asociadas con la enfermedad de Alzheimer. Tras un seguimiento promedio de hasta tres años, 21 personas habían desarrollado Alzheimer, 27 aún tenían un trastorno cognitivo leve, y ocho habían recuperado su salud cognitiva normal.
El líquido cefalorraquídeo de las personas que desarrollaron enfermedad de Alzheimer tenía niveles significativamente más altos de una proteína conocida como proteína precursora beta amiloide (sAPPβ) que el líquido cefalorraquídeo de aquellas que no desarrollaron el trastorno, con un promedio de 1,200 frente a 932 nanogramos por mililitro.
La predicción del riesgo de Alzheimer de un participante tuvo una precisión del 80 % cuando se combinaron tres factores, la sAPPβ, la edad de la persona, y un marcador conocido del daño celular en el cerebro llamado proteína tau.
Una proteína llamada beta amiloide 1-42 (Aβ1-42), que anteriormente se consideraba lo que se conoce como un «biomarcador» del Alzheimer, no fue un factor de predicción, según los investigadores.
El estudio aparece en la edición de junio de la revista Neurology. Hasta el 15 % de personas con problemas leves de memoria desarrollan enfermedad de Alzheimer cada año, apuntan los investigadores.
Estos resultados sugieren que la sAPPβ es un biomarcador que puede resultar útil y superior al marcador establecido Aβ 1-42 en el diagnóstico temprano de la enfermedad de Alzheimer.
Una explicación posible es que la Aβ1-42 mide eventos posteriores a las etapas iniciales que llevan a la producción de placa amiloide que se acumula en los cerebros de personas que sufren de enfermedad de Alzheimer.
El Dr. Perneczky dijo que la sAPPβ es una medida del primer paso crítico del desarrollo de la enfermedad de Alzheimer, y puede proveer información más precisa sobre los eventos patológicos centrales.
Fuente: Neurology