Especialistas médicos advierten que nueve de cada 10 niños obesos de dos a 17 años tienen riesgo de padecer hipertensión mientras que el 43 % de los adultos mexicanos tiene este mal, lo que significa que hay hasta 30 millones en riesgo si no recibe un tratamiento adecuado, y que el 55 % lo deja por los productos milagro.
En conferencia, el Dr. Ernesto Cardona, jefe del servicio del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la Universidad de Guadalajara, preciso que con estos datos la curva de la esperanza de vida disminuirá casi una década.
Actualmente de cada 10 niños que padecen hipertensión, nueve son por hipertensión secundaria porque el niño es obeso desde que nace y sigue obeso toda la vida, o porque el niño está obeso y es sedentario. Se está estimando que por primera vez en la historia la curva de esperanza de vida dará un vuelco para abajo, pues esta generación de niños no va a tener la misma sobrevida que los adultos actuales.
El Dr. Henry Punzi, director médico de la Trinity Hypertension Research Institute en Texas, advierte que en dos años el 55 % de los pacientes deja el medicamento, y que esto se debe en su mayoría al uso de productos milagro.
En una encuesta de dos años, el 55 % de los pacientes dejaron de tomar su medicina, la causa mencionada, fue por las múltiples tomas al día, y la segunda causa por la que los pacientes dejan de tomar sus medicamentos es debido a los efectos colaterales, asocian malestares adicionales y dejan el tratamiento.
El sobrepeso, el sedentarismo, el exceso de sal, grasas y azúcares o en el caso de los niños, son algunas de las causas más comunes de hipertensión infantil. Los síntomas más comunes de la hipertensión arterial infantil son los dolores de cabeza, el enrojecimiento de la cara y las orejas, así como: mareos, fatiga y sangrado nasal.