Según cálculos dados a conocer en el Congreso Infarma, celebrado en Barcelona España recientemente, más de 500 millones de personas utilizarán aplicaciones médicas diseñadas para telefonía móvil dentro los dos próximos años.
La atención al paciente crónico y su adherencia a los tratamientos es una de la áreas en las que la utilización de aplicaciones puede ser más efectiva, ya que en el ámbito sanitario es el que tiene mayor potencial de crecimiento en el sector de los teléfonos inteligentes.
Actualmente existen disponibles cerca de 17.000 aplicaciones de salud, la mayoría con un costo muy bajo para el usuario, y la mayoría de las personas están dispuestas a pagar por herramientas útiles y efectivas.
El 70% de estas aplicaciones médicas están pensadas para personas sin conocimientos médicos y el 30% son utilizadas por profesionales de la salud.