Para cualquier persona resulta extraño sentir un creciente apetito al mismo tiempo que bajan de peso. Un síntoma que podría indicar que padece Hipertiroidismo.
Este es un padecimiento generado por una producción excesiva de dos hormonas que produce la glándula tiroides (que se ubica en el cuello) y que provoca una aceleración en el metabolismo del organismo. Es decir, en las funciones que requieren de energía como podría ser el respirar o realizar la digestión.
El Hipertiroidismo afecta a una de cada 50 mil personas, la mayor parte de entre 20 y 50 años. Afecta con mayor frecuencia a las mujeres en una proporción de 8 por cada varón. Su causa más común es la Enfermedad de Graves, padecimiento que ocasiona que el sistema inmunológico ataque a la glándula tiroides, que responde aumentando su producción de hormonas.
Cuando se desarrolla Hipertiroidismo el paciente presenta síntomas como adelgazamiento físico, nerviosismo, intolerancia al calor, tendencia a sudar, fatiga y en otros casos vómitos, presión sanguínea alta, así como una de sus principales características, que son los ojos saltones.
El tratamiento del Hipertiroidismo se basa en el uso de fármacos especializados que inhiben la producción de las hormonas tiroides y en caso de ser necesario se quema la glándula mediante yodo radioactivo. A partir de entonces el paciente debe recibir hormonas de manera artificial.
Para lograr una detección temprana, se recomienda acudir al endocrinólogo cuando aparezcan síntomas como el llamado exoftalmos o apariencia de crecimiento de los globos oculares, así como nerviosidad, ansiedad, palpitaciones y adelgazamiento sin una causa explicable.