Los intentos de suicidio de los adolescentes homosexuales y bisexuales, e incluso de preadolescentes, son más comunes en áreas políticamente conservadoras donde las escuelas no tienen programas de apoyo a los derechos de los gays, refleja un estudio elaborado a 32.000 estudiantes de secundaria de los Estados Unidos.
Los estudios plantean como influenciaron los ambientes sociales negativos en los intentos de suicidio, comenta el autor del estudio de Mark Hatzenbuehler, psicólogo e investigador de la Universidad de Columbia. Su estudio encontró una mayor tasa de intentos de suicidio, incluso entre los niños que no fueron intimidados o estaban deprimidos cuando vivían en condados con menos apoyo a los grupos gays.
La investigación se centró en el estado de Oregon, se creó un índice social para evaluar que factores externos pueden contribuir a las tendencias suicidas. Esto es muy importante comenta el Dr. Robert Blum de la Escuela de Salud Pública de Johns Hopkins.
El estudio proporciona un poco más de profundidad, es evidente que se necesita mucho más conocimiento, pero esto es una gran paso en la dirección correcta, comenta el Dr. Blum, quien forma parte del comité del Instituto de Medicina que recientemente publicó un informe instando a una mayor investigación sobre temas de salud gay, también comenta que el nuevo estudio es el tipo de investigación que había faltado al grupo independiente que asesora al gobierno en materia de salud.
Investigaciones anteriores encontraron tasas de suicidio desproporcionadamente altas entre los adolescentes homosexuales. Un caso muy conocido, fue en la Universidad de Rutgers donde un joven de 18 años, saltó desde un puente después de que sus compañeros difundieron que había tenido sexo con otro hombre.
El estudio se basó en los intentos de los adolescentes suicidas presentados en un informe el año anterior. Aproximadamente el 20 % de los adolescentes homosexuales, lesbianas y bisexuales, dijeron que habían tenido un intento, frente al 4 % de los preadolescentes.
El estudio encontró que un contexto social que sea más acogedor está vinculado con 20% menos de intentos de suicidio que un ambiente que no brinde aceptación y apoyo a gays, lesbianas y bisexuales adolescentes. Los resultados muestran que los ambientes que son buenos para los jóvenes gay también son saludables para los jóvenes heterosexuales.
Los jóvenes gays y bisexuales están profundamente afectados por lo que sucede a su alrededor, incluyendo el clima social y el apoyo percibido.