Los pacientes con una exacerbación aguda de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica EPOC que reciben ventilación mecánica invasiva o no invasiva se benefician de una terapia sistémica con corticosteroides, confirmó un estudio encabezado por la Dra. Inmaculada Alia, del Hospital Universitario de Getafe, en España. Comparado con un placebo, el tratamiento con corticosteroides reduce la duración de la ventilación mecánica y la atención en terapia intensiva en un día en cada caso, aunque el segundo efecto no alcanzó importancia significativa. En pacientes que inicialmente requerían ventilación no invasiva, los corticosteroides eliminaron la necesidad de colocar un respirador artificial de rescate. El equipo de la Dra. Alia publicó su estudio en Archives of Internal Medicine. Un comentario en la misma revista indica que una estadía más breve en la unidad de terapia intensiva es clínicamente importante. Dada la carga económica de las exacerbaciones agudas en los pacientes con EPOC, disminuir el tiempo que se pasa en la unidad de cuidados intensivos, y la necesidad de ventilación mecánica de rescate, puede generar ahorros sustantivos. Aproximadamente el 10 % de los pacientes con exacerbaciones agudas de la EPOC necesitan un respirador artificial. La Dra. Alia y sus colegas realizaron un ensayo controlado con placebo y a doble ciego en 83 pacientes con exacerbación agua de la EPOC que estaban recibiendo ventilación mecánica invasiva o no invasiva. Los participantes fueron asignados al azar para recibir metilprednisolona (0,5 mg/kg cada seis horas durante tres días; o,5 mg/kg cada 12 horas los días cuatro a seis de internación; y 0,5 mg/kg por día los días siete a 10 de hospitalización), o placebo.
La recepción de corticosteroides generó una reducción en la duración promedio de la ventilación mecánica (tres días vs cuatro); una tendencia a una menor duración promedio en la estadía en unidad de terapia intesnsiva (seis vs siete días) y una disminución en la tasa de fracaso de la ventilación mecánica no invasiva (cero frente a un 37 %). Lo que es importante, según los investigadores, es que administrar corticosteroides sistémicos a este grupo de personas críticamente enfermas no pareció aumentar el riesgo de sangrado gastrointestinal, superinfecciones, trastornos psiquiátricos o debilidad neuromuscular adquirida. La mayor complicación fue la hiperglucemia, una consecuencia conocida de la terapia con corticosteroide.
Sin embargo, no hubo implicaciones clínicas desfavorables en este estudio, reconocieron que estos resultados no tendrían gran impacto en el tratamiento clínico actual de pacientes en unidades de terapia intensiva por exacerbaciones de la EPOC dado que la mayoría de ellos probablemente son tratados con corticosteroides.
No obstante, aclararon que los hallazgos brindan fuerte evidencia de los efectos beneficiosos de la terapia sistémica con corticosteroides sobre resultados clínicamente relevantes en una población de pacientes que nunca antes había sido incluida en un ensayo.
Fuente: Archives of Internal Medicine