Barbara Wiesberger, a sus 84 años de edad, es un claro ejemplo de que los buenos hábitos permiten tener una excelente condición física y en consecuencia una calidad de vida excepcional. La octogenaria Barbara grabó un video bailando al ritmo de Coldplay.
Barbara Weisberger comenzó a tomar clases de ballet a la edad tres años a mediados de los años 30 en Brooklin. A los 8 años, su maestra reconoció el don de Barbara para la danza y la presentó con el coreógrafo ruso George Balanchine.
Intentando formar una compañía americana de ballet clásico, Balanchine creó la Escuela Americana de Ballet como fuente de bailarines profesionales. Balanchine notó el don de Barbara Wisberger y la tomó como su primera alumna infantil. Cuando montaba ballets en la Ópera de Nueva York y necesitaba a una niña para un personaje, inmediatamente incluía a Barbara, quien desde los 11 años de edad se presentó en la Metropolitan Opera House en Nueva York.
A principios de los años 40 su familia se mudó a Wilmington, Delaware y concluyó su relación con Balanchine. Años después se reencontraron y con su ayuda, Barbara Weisberger fundó la compañía de Ballet de Pennsylvania, que a principios de los años 70 cobró reconocimiento internacional.
En 1982 Barbara renunció al puesto que ostentó 20 años como directora artística de la compañía y creó el Proyecto Carlisle, un centro para el desarrollo de coreografía y ballet, que aún hoy en día sigue siendo referencia en los Estados Unidos.
