El debate sobre los peligros de las bebidas energéticas alcohólicas, muy populares entre los jóvenes porque son baratas y añaden la potencia de la cafeína, se ha intensificado después de que varios estudiantes se intoxicaron hasta tal punto que terminaron en el hospital.
Las bebidas con sabores frutales, vendidas bajo atractivos nombres, vienen en recipientes de gran tamaño que recuerdan a las bebidas deportivas y los refrescos sin alcohol, y los críticos advierten que esto no es accidental. Estas bebidas se están vendiendo a consumidores jóvenes como una forma segura y barata de beber hasta el exceso.
Una bebida de malta con sabor a fruta que se vende como Four Loko, ha causado preocupación en particular porque fue consumida por estudiantes universitarios de Nueva Jersey y el estado Washington, en los Estados Unidos. Estos jóvenes terminaron en la sala de emergencia, algunos con altos niveles de envenenamiento por alcohol.
La imagen de refresco o bebidas energéticas de estos productos no es más que una apariencia peligrosa, asegura el Dr. Eric A. Weiss, experto en medicina de emergencia de la facultad de medicina de la Universidad de Stanford en Palo Alto, California. Esconde el hecho de que se están consumiendo cantidades significativas de alcohol. Y eso es potencialmente peligroso, no sólo porque daña la salud, sino porque afecta la coordinación y el juicio de las personas.
Estas bebidas alcohólicas con cafeína pueden contener entre 6 y 12 % de alcohol. Ese es el equivalente de más o menos 2 a 4 cervezas.
Lo que preocupa más como médico de emergencias es que alguien se bebe una lata de esto y no se da cuenta de cuánto alcohol ha consumido, comenta el Dr. Weiss, mientras que si bebe 4 cervezas probablemente tenga mucho más en cuenta la cantidad de alcohol que ha consumido y tal vez no intentará conducir».
Quien piense que la cafeína de estas bebidas puede proteger contra los efectos negativos de la intoxicación tendrá una gran decepción.
La cafeína puede ayudar a mantener despierto, pero no mitiga el efecto del alcohol. No reduce la pérdida de coordinación, los malos juicios, las náuseas ni el malestar por beber en exceso.
Hasta ahora no hay ninguna ley para regular o prohibir específicamente la venta de bebidas alcohólicas con cafeína, que actualmente llevan etiquetas que advierten sobre el contenido de alcohol. Sin embargo, la seguridad de estas bebidas está siendo revisada por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de E.U.A., que no ha dado su visto bueno para la adición de cafeína a una bebida alcohólica.
Lo peligroso es el paquete en conjunto. Es por la forma en que se promociona específicamente con latas coloridas y bonitas de nombres graciosos claramente diseñados para atraer a gente joven, así como la falsa percepción de que la cafeína que contienen mantendrá a los bebedores alertas y de alguna forma protegerá contra la intoxicación extrema. Además está el efecto toxicológico real de combinar un estimulante del sistema nervioso central con depresivos.
Combinar alcohol y cafeína no es algo nuevo. Pero la forma de promocionarlo sí lo es. Estas bebidas fomentan beber grandes cantidades de alcohol y los jóvenes pueden ser presa fácil.