Un novedoso biosensor localizado en el cuerpo de un paciente puede medir continuamente los niveles de glucosa usando otros fluidos que la sangre, como el sudor o las lagrimas.
Investigadores del Instituto Fraunhofer para Circuitos y Sistemas Microelectrónicos, en Alemania, desarrollaron el biosensor nuevo que implica una reacción electroquímica la cual se activa con la ayuda de una enzima. La glucosa oxidasa convierte la glucosa en peróxido de hidrógeno y otras sustancias químicas cuya concentración se puede medir con un potensiostato. La medición se usa para calcular el nivel de glucosa. La característica especial del biosensor es el tamaño del chip que mide apenas 0,5 x 2,0 milímetros, y que incluye el sistema de diagnóstico.
Sin embargo, el tamaño mínimo no es lo único que suministra una ventaja sustancial con respecto a los otros biosensores previos de este tipo; consume sustancialmente menos energía puesto que es un sistema pasivo. El sensor es capaz de enviar y recibir paquetes de datos, pero también se le puede suministrar energía a través de radiofrecuencia y aunque otros sistemas anteriores requieren alrededor de 500 microamperios a cinco voltios, el nuevo sistema requiere menos de 100 microamperios, aumentando la durabilidad y permitiendo que el paciente use el sensor durante semanas o inclusive meses.
Según los investigadores los dispositivos no invasivos de medición para monitorear los niveles de glucosa en la sangre pueden llegar a ser la base para un desarrollo adicional particularmente útil en el futuro; el biochip podrá controlar una bomba de insulina, en miniatura, implantada que, basándose en el valor de glucosa medido, indica la cantidad precisa de insulina que debe ser administrada. El biosensor de glucosa, que todavía está en desarrollo, fue diseñado por los investigadores de NovioTech en Nijmegen, Holanda y podrá fabricarse y ser tan rentable que será el más adecuado para la producción en masa.
El biosensor transmite los datos a través de una interfaz inalámbrica, por ejemplo a un receptor móvil. Así, el paciente puede mantener un ojo constante en su nivel de glucosa.