Cierto tipo de tatuajes, incluidos los realizados con tinta amarilla o azul y los más antiguos y grandes, son más difíciles de eliminar que los que se realizan con láser tradicional, según un estudio realizado por la Dra. Nazanin Saedi, de Thomas Jefferson University, en Filadelfia EUA.
Los tatuajes pequeños con tinta negra demoran varios años en desaparecer, menos de la mitad de las 352 personas que se querían borrar un tatuaje con un láser por conmutación Q logró su objetivo con 10 sesiones y tres cuartos lo hizo después de 15 sesiones.
Los fumadores y quienes realizaron el tratamiento con menos de dos meses de intervalo fueron los que menos suerte tuvieron para borrarse los tatuajes. La mitad de los jóvenes que se realiza un tatuaje opta por eliminarlo, para eso se utilizan pulsos de láser para quebrar la tinta, después, las células inmunológicas eliminan esas partículas.
La reacción del láser con los pigmentos hace que las tintas amarillas y azules cambien de color, pero no desaparecen con el tratamiento, las personas con tatuajes coloridos deben saber que borrarlos es más difícil y sin los resultados esperados.
El efecto del tabaquismo es el resultado más novedoso e interesante y puede ser explicado por su acción en el sistema inmunológico, ya que altera la función de las células encargadas de eliminar la tinta sobrante después que lo rompe el láser.
En los últimos 20 años no hubo grandes cambios en los tratamientos con láser para borrar los tatuajes, actualmente se utiliza un nuevo dispositivo láser para eliminar tatuajes con un pulso más corto (que dura un picosegundo) comparado con el pulso tradicional (que dura un nanosegundo). Con el láser por conmutación Q, los pacientes necesitan muchas sesiones para borrar un tatuaje.
Cada sesión cuesta aprox. 200 dólares, la cantidad de sesiones necesarias para borrar un tatuaje es una barrera para muchos, y la cantidad de personas que se tatúan está creciendo, lo que significa que dentro de 10 o 20 años aumentará la cantidad de personas que quieran eliminar sus tatuajes, la cantidad de personas que logran borrarse un tatuaje es muy reducida (…) y eso ocurre en parte porque se necesitan muchas sesiones para lograrlo.
Por ahora, la decisión debe tomarse con seriedad. Hacerse un tatuaje demora entre media y una hora, pero eliminarlo demora años.
Fuente: Archives of Dermatology