Desde los años 80 las investigaciones demuestran que existe una relación entre el trabajo docente y diversos trastornos de salud tanto a nivel biológico (problemas cardiovasculares, respiratorios, lumbalgias, cervicalgias, úlcera de estómago, etc.), como psicológico (ansiedad, depresión, insatisfacción laboral, reducción de la productividad, ausentismo laboral, pasividad en la vida extra laboral. etc.).
Los trastornos psicológicos ocupan el primer puesto a la hora de que los maestros se tomen licencia. Conozca la lista de padecimientos más comunes:
Las tensiones laborales, el estrés y la afonía son los principales malestares que sufren los docentes, según un informe de la Federación de Educadores, que advierte que los “trastornos psicológicos de origen ocupacional” están al tope en las enfermedades que afectan a los maestros.
Las tensiones laborales, los episodios violentos en las aulas y la imposibilidad de satisfacer demandas que exceden el terreno educativo, que los dejan afónicos, desequilibran en lo emocional y quitan fuerzas físicas a los maestros.
El 32% de las consultas recibidas en 2010 por el departamento de Salud, estuvo vinculado con “enfermedades derivadas de trastornos psicosociales, dejando en segundo lugar a los problemas de locución, con el 21%.
El estudio, compila 2.220 consultas registradas entre abril de 2009 y marzo de 2010, ubica en tercer término a las afecciones respiratorias estacionale 15%, seguidas por los problemas musculares y óseos 12%, y las ginecológicas en un10%.
El grupo de maestros cuya salud se vio más afectada fue el comprendido por docentes de entre 40 y 55 años y en esta franja se incluye a 46 de cada cien consultas.
