La mayoría de las parejas tiende a aferrarse a ciertas creencias sobre el amor y el matrimonio que son conceptos erróneos. Estos mitos pueden sabotear nuestras relaciones mediante la creación de expectativas poco realistas que llevan a la frustración, la ira y la tristeza.
La Dra. Terri Orbuch, autora del libro “5 Pasos Simples para Llevar su Matrimonio de Bueno a Excelente”, refiere que hay 4 mitos en torno a las relaciones de pareja:
Mito 1: Los polos opuestos se atraen y tienen más probabilidades de permanecer interesados el uno en el otro a largo plazo.
Realidad: Las similitudes son lo que en realidad mantiene unidas a las parejas con el paso del tiempo. Los integrantes de la pareja pueden tener gustos diferentes en la música, provenir de distinta clase social o religión, pero deben coincidir en los aspectos básicos de la vida.
Consejo: Si deseas encontrar a una persona para envejecer juntos, busca a alguien cuyos valores sean compatibles con los suyos.
Mito 2: Una relación perfecta es aquella en la que no hay conflictos.
Realidad: La falta de señales de conflicto en la pareja significa que no se ocupan de cuestiones que realmente importan. Las parejas dicen no tener tensiones o diferencias sobre el dinero, la familia, la familia del cónyuge, el tiempo de ocio, las creencias religiosas, terminan siendo infelices a la larga.
Consejo: No rehuir las conversaciones difíciles. Aprender a estar en desacuerdo de una manera sana y productiva es un componente clave de las relaciones de pareja.
Mito 3: Tener vidas separadas mantiene unidas a las parejas a largo plazo.
Realidad: La interdependencia – social, emocional y financiera – es lo que crea el incentivo para que las parejas permanezcan juntas. También es importante ser independiente, tener sus propios intereses, actividades y amigos. Esto añade emoción y frescura a las relaciones. Pero las parejas que viven vidas paralelas y no invitan a su esposo(a) a su mundo de forma regular tienden a distanciarse y ser infelices a largo plazo.
Consejo: Las parejas que trabajan en la adquisición de intereses comunes, son mucho más felices conforme pasan los años, que aquellas que llevan su propia vida, de manera independiente de su cónyuge.
Mito 4: Para ser feliz, es necesario hablar frecuentemente acerca de los retos y problemas de la relación.
Realidad: Para que la intimidad que se produzca en una relación, ambos deben compartir y dar a conocer las preocupaciones de vez en cuando. Pero hay que tener cuidado con el tiempo que se pasa discutiendo estos asuntos. Los hombres y las mujeres tienen tolerancias muy diferentes para «hablar de la relación». Las mujeres, por lo general, son propensas a charlar sobre la relación, para sentirse conectadas y felices. Los hombres, por el contrario, no disfrutan el hecho de hablar de la relación, sino que los hace sentir culpables y presionados generándoles preocupación y angustia.
Consejo: A las mujeres, se les recomienda elegir cuidadosamente los momentos para hablar de sentimientos y de la relación. A los hombres, se les aconseja entender la necesidad de las mujeres para hablar de la relación para aclarar puntos y sentirse tranquila y amada.