El uso de tamoxifeno está asociado con una reducción significativa del riesgo de padecer un segundo cáncer en las portadoras de los genes del cáncer de mama BRCA1 o BRCA2, según revela un nuevo estudio dirigido por la Dra. Kelly-Anne Phillips, del Centro de Oncología Peter MacCallum, en Victoria, Australia.
Las mujeres con mutaciones de esos genes son mucho más propensas a desarrollar cáncer de mama y ovario que otras mujeres. Algunas, como la actriz Angelina Jolie, optarán por extirparse las mamas de manera preventiva, lo que reduce un 95% o más el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Otras elegirán extirparse los ovarios, lo que reduce el riesgo al 50%.
Los resultados del estudio sugieren que el uso de tamoxifeno sería otra opción preventiva del cáncer mamario en las mujeres que ya hayan tenido o no la enfermedad, según aseguran los autores. A la luz de estos hallazgos, las portadoras de una mutación del BRCA1 o BRCA2 deben revisar las opciones para controlar el riesgo de desarrollar cáncer con sus médicos de cabecera, comenta la Dra. Kelly-Anne Phillips.
A las mujeres con cáncer mamario portadoras de mutaciones genéticas no se les suele ofrecer el tratamiento con tamoxifeno. En estudios previos sobre el uso de tamoxifeno para la prevención del cáncer de mama hallaron muy pocas participantes con mutaciones de los genes BRCA1 y BRCA2, por lo que existe información insuficiente sobre si el fármaco ayudaría a ese grupo de mujeres, comenta la Dra. Phillips.
Con su equipo analizó los resultados de tres estudios sobre un total de 1.583 portadoras de mutaciones de BRCA1 y 881 portadoras de mutaciones de BRCA2 que habían desarrollado tumor en una mama. El 24% del primer grupo y el 52% del segundo grupo comenzaron a tomar tamoxifeno después del diagnóstico. Durante ocho años, 520 mujeres (24% con mutaciones de BRCA1 y 17% con mutaciones de BRCA2) desarrollaron un tumor en la otra mama.
Las mujeres del primer grupo eran un 62% menos propensas a desarrollar un segundo cáncer si habían tomado tamoxifeno, mientras que en las usuarias del fármaco del segundo grupo el riesgo caía un 67%. El uso de tamoxifeno estuvo relacionado con una menor aparición de segundos cánceres, independientemente de si los tumores originales dependían del estrógeno para crecer, los resultados del estudio se publicaron en la revista especializada Journal of Clinical Oncology.
El estudio sugiere que el tamoxifeno debe considerarse para el tratamiento de todas las portadoras de mutaciones de los genes BRCA1 y BRCA2 que tuvieron cáncer mamario (…) y no optaron por la cirugía para extirpar todo el tejido mamario.
Las portadoras de las mutaciones de esos genes que aún no desarrollaron cáncer de mama también deben considerar ese tratamiento farmacológico. En este caso, el tamoxifeno debería utilizarse mientras las mujeres son jóvenes y premenopáusicas porque son el grupo de riesgo del cáncer mamario a corta edad.
La Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica recomienda conversar con las mujeres mayores de 35 años y de alto riesgo de desarrollar cáncer mamario sobre el uso de un tratamiento con tamoxifeno durante cinco años.
Fuente: Journal of Clinical Oncology