La investigación encabezada por la Dra. Myra S. Hunter, del King’s College de Londres en el Reino Unido, que fue publicada en la revista Menopause, puso a prueba el tratamiento en 140 mujeres con sofocos y sudores nocturnos característicos de la menopausia.
A las seis semanas, más de dos tercios del grupo tratado con la terapia, ya sea en sesiones grupales o de autoayuda, lograron una reducción clínicamente significativa de los trastornos. Esto quiere decir que los síntomas eran mucho menos problemáticos y no interferían tanto en la vida de las mujeres, explica la Dra. Hunter. La terapia cognitiva conductual actúa al modificar la percepción y la interpretación (de los sofocos) y contrarrestar las creencias negativas sobre la menopausia, la experta explica que el tratamiento incluye ejercicios para alejar la atención de los sofocos y los pensamientos negativos.
Para el ensayo, el equipo de la Dra. Hunter reunió a 140 mujeres que habían padecido sofocos y sudoración nocturna por lo menos 10 veces por semana durante un mes o más. Al azar, las mujeres realizaron sesiones de terapia grupal, autoayuda o ningún tratamiento (grupo control). Las participantes tratadas con sesiones grupales concurrieron a cuatro sesiones durante un mes, mientras que las mujeres tratadas con autoayuda tuvieron una reunión y recibieron llamadas telefónicas del psicólogo a cargo del tratamiento, también aprendieron estrategias para sobrellevar los sofocos con un libro y un CD.
A las seis semanas, el 65% de las mujeres tratadas con las sesiones grupales había logrado reducir los problemas que les producían los sofocos, comparado con el 73% del grupo tratado con sesiones de autoayuda y el 21% del grupo control. Este efecto se mantuvo hasta los seis meses, aunque en ese momento también había mejorado un tercio del grupo sin tratar. La explicación estaría en el cambio de la forma en la que las mujeres perciben los síntomas.
El equipo acaba de publicar el libro de autoayuda y entrenará profesionales de la salud de distintos condados para ampliar el acceso a la terapia conductual para los síntomas menopáusicos.
Fuente: Revista Menopause