Tres recomendaciones para mejorar la respuesta sexual en la mujer
1) Propiciar la erección del clítoris, no apresurando las cosas:
La falta de erección en el clítoris puede surgir incluso cuando el deseo está presente. El proceso de erección del clítoris tiene que ver con un mayor flujo de sangre hacia la pelvis, lo que produce congestión en la vagina, el útero y el clítoris.
Si la pareja de la mujer apresura las cosas, podría intentar realizar la penetración antes de que los órganos de la mujer «estén preparados», lo que la podría conducir a más dolor, y, de esta forma, a mayores fallas en la erección. Por lo tanto, hay que estimular el clítoris antes de la penetración, con el dedo humedecido o con la lengua.
2) Favorecer el deseo sexual
Un reciente estudio realizado en Estados Unidos demostró que la «falta de interés sexual» era el mayor problema sexual en las mujeres, siendo señalado por casi la tercera parte de las mujeres de entre 40 y 60 años con dificultades sexuales. Si una mujer ha perdido (o nunca tuvo) la capacidad de elaborar fantasías o deseos sexuales, su pareja podría ayudarle de varias formas, mediante el habla, la comunicación, las caricias, los mimos, la paciencia, y la sugerencia de distintos tipos de relaciones.
Lo primero que deben hacer estas mujeres es ver a su médico de cabecera o ginecólogo. Hay que recordar que gran parte del deseo sexual inicia en la mente y en el caso de las mujeres con gran dosis de romanticismo. Así que es altamente recomendable que las parejas busquen situaciones románticas para lograr que despierte el deseo sexual en la mujer.
3) Mejorar la lubricación
La causa más común de problemas sexuales en las mujeres después de la menopausia, tiene que ver con una falta de lubricación adecuada.
Con la edad, la pared vaginal se hace más rígida, menos elástica y produce menor cantitad de lubricante durante la excitación. Esta condición puede empeorar por ciertos desórdenes tales como la diabetes, la tensión arterial alta, la radioterapia para los tumores pélvicos, o el uso de drogas anti-estrógeno en el tratamiento contra el cáncer de mama.
La saliva es el lubricante natural más efectivo, pero la vaselina y la jalea K-Y son muy buenos sustitutos.