Los políticos islandeses estudian la prohibición de la venta de tabaco en todos los establecimientos. Quieren hacer que sea un producto que se adquiera en farmacia, y sólo por prescripción médica, la propuesta, que será debatida en el parlamento islandés, establece que los médicos ofrezcan a sus pacientes fumadores tratamientos y programas para desengancharles del tabaco. Sólo si no lo consiguen, obtendrán la receta para adquirir cigarrillos.
El tabaco no estará subvencionado y seguirá teniendo su precio habitual en el mercado islandés, de unos cinco euros y medio.
La iniciativa está liderada por la parlamentaria y ex ministra de Salud, que afirma tener apoyos en miembros de cinco partidos de la cámara. Uno de sus portavoces, sin embargo, ha reconocido que aunque la propuesta es «muy seria», tiene pocas posibilidades de éxito. El Parlamento deberá votar en breve a favor o en contra de la medida
La propuesta, forma parte de un plan de 10 años para reducir el consumo de tabaco.