¿Te ha ocurrido que cuando alguien cerca de ti bosteza, tes dan ganas de bostezar también? Científicos se dieron a la tarea de investigar la causa… Desde Hipócrates, se considera que el bostezo nos ayuda a reducir la temperatura corporal. Cuando la temperatura a nivel cerebral aumenta entre punto 5 y un grado, el bostezo sirve para liberar ese calor que se genera.
Otra causa de bostezo es la falta de oxígeno suficiente en el núcleo paraventricular del hipotálamo, un área del cerebro involucrada en la secreción de diversas hormonas. Pero, ¿porqué son contagiosos los bostezos?
Están relacionados con la capacidad de empatía de una persona… digamos que es una manera de sincronizarnos con el prójimo. De hecho, los investigadores encontraron que el bostezo no es contagioso en personas que tienen autismo o esquizofrenia y tampoco lo es en niños menores de cuatro años de edad o personas adultas mayores.
Las llamadas neuronas “en espejo”se activan al escuchar, ver o leer acerca de un bostezo y la persona bosteza a manera de imitación.
De ahí que a mayor empatía con una persona sea más fácil el contagio del bostezo, un acto fisiológico que los mamíferos ejecutamos desde nuestra existencia en el vientre materno.