Lentes de contacto para vista cansada

¿Te cuesta trabajo leer el menú de un restaurante, escribir un cheque o leer las instrucciones del nuevo aparato que adquiriste? ¿Tienes que alejar el libro que estás leyendo y ya no te alcanzan los brazos? Seguramente lo que estás experimentando es vista cansada.
La vista cansada o presbicia es una condición en la cual las personas comienzan a no ver bien de cerca debido a que el cristalino pierde su capacidad para enfocar.
En el ojo joven, el cristalino es capaz de modificar su forma para enfocar objetos cercanos, pero esta elasticidad se va perdiendo con el paso de los años. Una persona que a lo largo de su juventud ha tenido una visión 20/20 va a comenzar a padecer de vista cansada a partir de los 40 años de edad. Sin embargo, quienes tienen miopía y han usado lentes desde su juventud van a tener una compensación a la hora de ver objetos cercanos llegando a los 40.
En cada librería o tienda de autoservicio se venden anteojos para leer, pero si eres de los que no quieren usarlos existe una excelente alternativa: los lentes de contacto multifocales.
Los lentes de contacto multifocales pueden ser rígidos, blandos y hasta desechables que se usan un día y se tiran. Cualquier opción es buena para ver de lejos y de cerca.
Los lentes de contacto multifocales se dividen en dos tipos: los que proporcionan visión alterna, donde la vista se desplaza hacia arriba o abajo, buscando el aumento requerido, y los de visión simultánea, que alternan aumento de distancia media y cercana y la vista aprende a seleccionar la correcta dependiendo de lo que se quiere mirar. En visión simultánea hay dos tipos de lentes de contacto multifocales: los concentricos anulares y los asféricos, donde alternan los anillos con los distintos aumentos.