En muchas personas vemos una respuesta alérgica, es decir, un conjunto de síntomas que son el resultado de una hipersensibilidad de su sistema inmune al entrar en contacto con ciertas sustancias o alergenos que normalmente resultan inofensivos para una gran mayoría. El término alergeno incluye cualquier sustancia que pueda hacer detonar una reacción alérgica, siendo los más comunes el polen de los árboles, los ácaros del polvo y el pelo de ciertos animales.
Los síntomas de las alergias varían dependiendo de qué esté causando la reacción. Cuando la persona alérgica entra en contacto con el polen de algunas plantas estacionales que es transportado por el aire, empieza a experimentar una serie de síntomas en nariz y ojos, como rinitis o goteo nasal, congestión, picor en la nariz, en la boca o incluso en la garganta (rinitis alérgica), conjuntivitis, irritación en los ojos, que pueden picar y estar enrojecidos, hinchados o llorosos (conjuntivitis alérgica).
El Índice Metropolitano de la Calidad del Aire (IMECA) en el Valle de México se mantiene en 102, se recomienda la suspensión de actividades al aire libre, redoblar la vigilancia y control de incendios en áreas agrícolas y urbanas, agilizar el tráfico vehicular en puntos conflictivos y la suspensión de trabajos de mantenimiento urbano.
Los niños, adultos mayores y enfermos de las vías respiratorias integran el grupo más vulnerable, por lo que es conveniente que no se expongan al aire libre mientras prevalezcan los altos niveles de Partículas Suspendidas.
Entre otras medidas, también se pide a la población reducir el uso del automóvil, planeando los recorridos para combinar rutas y reducir el número de viajes o compartiendo el vehículo con otros pasajeros.
Si la contaminación persiste los principales perjudicados son alérgicos, asmáticos, enfermos de EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva crónica), niños y personas mayores. Las altas concentraciones de gases del tránsito que irritan las vías respiratorias, como el dióxido de nitrógeno (NO2), han coincidido con un pico de polinización de árboles en la ciudad de México.
En épocas de mucha contaminación, los alérgicos, que ya de por sí tienen las mucosas inflamadas e irritadas, empeoran. Los asmáticos y los bronquíticos crónicos también. La contaminación y el polen se potencian. Ni los que no padecen ninguna enfermedad respiratoria se salvan. «La contaminación per se tiene un efecto irritante sobre las mucosas
Si sigue el tiempo soleado de estos días que favorece la polinización y dificulta la renovación del aire, la alerta para los alérgicos se prolongará