La neuropatía auditiva o disincronía auditiva produce una incapacidad para entender el lenguaje y los sonidos complejos aunque la pérdida de audición no sea importante.
Dentro de las pérdidas de audición que se producen durante la infancia, esta neuropatía auditiva es frecuente en los pacientes, ellos oyen bastante bien; sin embargo, tienen una dificultad tremenda para la discriminación de las palabras. Aunque puede darse en personas adultas, esta patología afecta fundamentalmente a los niños pequeños, lo que hace que el problema pase desapercibido hasta que el paciente se muestra incapaz de aprender a hablar.
Las causas de esta enfermedad son diversas. Puede deberse a factores genéticos, estar asociada a determinados síndromes neurológicos o ser consecuencia de un nacimiento prematuro, o una alta bilirrubina , el número de casos de todos los tipos de sordera que sufren los recién nacidos ha disminuido en las últimas décadas, de los 5 por cada mil recién nacidos en 1997 a los 0,66 por mil hoy en día.
La mayor parte de los casos de neuropatía auditiva se debe a una afección de las células ciliadas internas, uno de los dos tipos de células sensoriales del oído. Mientras que las células ciliadas externas son capaces de percibir sonidos de baja intensidad, no hacen una buena discriminación de su tonalidad. Al contrario, las internas discriminan muy bien el tono de los sonidos, aunque para percibirlos precisan de una mayor intensidad
La mayoría de las sorderas del oído interno comienzan afectando las células ciliadas externas, lo que provoca una pérdida de audición, aunque el sujeto discrimine los sonidos sin dificultad. Los especialistas recomiendan realizar el diagnóstico de estas patologías durante el primer año de vida, realizando un screening neonatal. Si éste es negativo, se realiza un estudio audiológico completo con pruebas específicas para detectar neuropatías auditivas y otro tipo de sorderas. El mejor tratamiento de estas enfermedades es el implante coclear antes de los dos años, y el uso de auxiliares auditivos o dispositivos de audición. Cuando se cumple esta edad comienza a perderse la plasticidad neuronal auditiva. Por tanto, la sordera debe paliarse antes por medio de prótesis o con un implante coclear, según el caso. Si no, se complica el aprendizaje del lenguaje hablado, y a partir de los 6 años es prácticamente imposible aprenderlo con normalidad. Solo en los casos de sordera por meningitis el médico recomienda realizar el implante coclear antes del año, para evitar que el espacio donde se coloca el implante se osifique.
Si usted o algún familiar o amistad tiene problemas de audición, visite www.audiotech.com.mx