La acalasia es un desorden poco frecuente de los músculos lisos del esófago, el tubo muscular que transporta los alimentos desde la boca hacia el estómago. Un anillo muscular en el punto donde el esófago y el estómago se unen (esfínter esofágico inferior) normalmente se relaja durante la deglución. En personas con acalasia, este anillo muscular no se relaja tan bien., la razón para este problema es el daño a los nervios del esófago.
La acalasia es un trastorno que puede presentarse a cualquier edad, pero es más común en personas de mediana edad o adultos mayores, este problema puede ser hereditario.
Los principales síntomas son: Reflujo (regurgitación) de alimento, dolor torácico que puede incrementarse después de comer o puede sentirse en la espalda, el cuello y los brazos, tos, dificultad para deglutir líquidos y sólidos, acidez gástrica, pérdida de peso involuntaria
Los exámenes para detectar la acalasia son: Manometría esofágica, esofagogastroduodenoscopia, esofagografía
Las terapias más utilizadas para tratar la acalasia son: Inyección con toxina botulínica, ya que esto puede ayudar a relajar los músculos del esfínter, pero cualquier beneficio desaparece en cuestión de semanas o meses, medicamentos, como los nitratos de acción prolongada o los bloqueadores de los canales de calcio, que se pueden emplear para bajar la presión en el esfínter esofágico inferior, cirugía, llamada esofagomiotomía, que se puede necesitar para disminuir la presión en el esfínter inferior. Ensanchamiento (dilatación) del esófago en el lugar del estrechamiento (realizado durante una esofagogastroduodenoscopia).
Los pronósticos de la cirugía y de los tratamientos no quirúrgicos son similares, algunas veces, se necesita más de un tratamiento.
Las posibles complicaciones son: Reflujo (regurgitación) de ácido o alimento del estómago hacia el esófago, broncoaspiración de los alimentos, lo cual puede causar neumonía, ruptura o perforación del esófago.