Un equipo de investigadores demostró que la droga llamada (+)-naloxona puede bloquear la adicción a la morfina y la heroína mientras que, al mismo tiempo, promueve su efecto analgésico.
El Dr. Mark Hutchinson, inmunólogo a cargo del estudio de la Universidad de Adelaida en Australia, explica que este hallazgo podrá permitir el desarrollo de fármacos para personas con dolor muy fuerte y para adictos a la heroína que buscan superar su problema.
El estudio fue publicado en la revista Journal of Neuroscience.
Tanto el cerebro como el sistema inmune tienen un rol clave en la generación de las adicciones, los investigadores encontraron que bloqueando un circuito en el sistema inmune es posible aliviar el fuerte deseo por las drogas opioides.
El estudio muestra que se puede frenar la adicción a través del sistema inmune, sin dirigirse a las conexiones cerebrales, la clave esta en un receptor del sistema inmune conocido como TLR4, al cual se unen tanto las bacterias invasoras como las drogas opioides como la morfina y la heroína.
Lo que hace la (+)-naloxona es cortar la necesidad de tomar opioides y por lo tanto elimina las conductas asociadas a las adicción. Además, cambia la neuroquímica del cerebro debido a que deja de producir dopamina, una sustancia importante para la sensación de recompensa que da la droga.
La (+)-naloxona será muy útil como droga para administrar en conjunto con la morfina, para que los pacientes no se vuelvan adictos mientras alivian su dolor. Este fármaco tiene el potencial de brindar avances muy importantes en el cuidado de los pacientes.