Un informe del Colegio Real de Psiquiatría del Reino Unido ha recomendado que se reduzca a la mitad el límite de consumo de alcohol entre las personas mayores.
Las recomendaciones para las personas mayores de 65 años sobre cuánto alcohol se puede consumir sin poner en riesgo la salud debe reducirse «drásticamente».
Se sabe que el exceso en el consumo de alcohol es invariablemente malo y por eso las autoridades sanitarias han establecido recomendaciones sobre cuánto alcohol podemos consumir sin poner en riesgo nuestra salud.
Aunque estas recomendaciones pueden variar de un país a otro, en general son similares porque están basadas en estudios científicos que han comprobado cuáles son los efectos y los daños del alcohol en nuestro organismo.
En el Reino Unido se recomienda que los hombres no beban más de tres o cuatro unidades al día (el equivalente a dos copas regulares de vino o dos botellas de cerveza clara).
Y que las mujeres limiten su consumo a entre dos y tres unidades diarias (una copa regular de vino o una botella de cerveza clara).
Aunque hasta ahora no se había hecho una diferencia entre la edad de los adultos, un nuevo estudio llevado a cabo en el Royal College of Psychiatrists (Colegio Real de Psiquiatras) afirma que estos límites no son aplicables a las personas mayores.
El informe del Colegio Real se titula «Nuestros adictos invisibles» y expresa que los bebedores mayores tienen menos capacidad para procesar el alcohol y que la bebida puede también interactuar con medicamentos que pueden estar tomando para sus enfermedades.
Los investigadores subrayan que las recomendaciones actuales, de limitar el consumo a 14 unidades de alcohol para mujeres y 21 para hombres a la semana, están basadas en estudios llevados a cabo con adultos jóvenes.
Los expertos afirman además que hay un creciente problema de abuso de sustancias entre los adultos mayores.
La opinión tradicional es que el abuso del alcohol no es común entre los adultos mayores y que el abuso de drogas es muy raro» afirma la Dra. Ilana Crome, una de las autoras del estudio.
La falta de concientización significa que los médicos generales y otros profesionales de salud a menudo pasan por alto o descartan los signos de que una persona tiene un problema.
Este informe destaca la magnitud del problema y propone que no sigan ignorándose las múltiples necesidades médicas y sociales de este grupo de personas.
El informe señala que un 35% de las personas que presentan un problema de abuso de alcohol son adultos mayores, que a menudo beben como resultado de los grandes cambios en su vida como la jubilación, la muerte de un ser querido o sentimientos de aburrimiento, soledad o depresión.
La atención se ha centrado en el problema de los jóvenes que beben en exceso.
Pero la forma como beben y cuánto beben se desconoce porque, a diferencia de los bebedores jóvenes, mucha gente mayor bebe en sus hogares.
Los expertos están pidiendo que las autoridades de salud emitan recomendaciones separadas sobre los límites de consumo de alcohol que son seguros para los adultos mayores: 1,5 unidades diarias o 11 unidades a la semana.
Los problemas de los bebedores mayores a menudo son ignorados.
Este informe está pidiendo reconocer el problema del consumo excesivo de alcohol entre los adultos mayores, que está muy extendido pero puede prevenirse.