Un equipo de científicos suizos y franceses encabezador por el Dr. Michel Muhlethaler, de la Universidad de Ginebra, Suiza, investigó los beneficios que trae dormir mientras el cuerpo oscila en un movimiento mecedor. Los resultados del trabajo, sugieren que este movimiento, similar al que se experimenta el dormir en una hamaca, mejora la calidad del descanso e induce más rápidamente al sueño.
Para realizar la experimentación, los científicos estudiaron a 12 representantes del sexo masculino, que no tienen la costumbre de dormir siesta, que se recostaran inicialmente en una cama fija y luego lo hicieran en una mecedora.
Durante la estadía en la cama y en la mecedora, se medían los movimientos cerebrales, oculares y musculares a través de pruebas de escaneo. Las conclusiones demostraron que los participantes se durmieron de una forma más rápida y profunda en la cama mecedora que en la cama fija.
El Dr. Muhlethaler indicó que estos resultados apoyan la noción intuitiva de que el sueño se facilita al mecerse, tal como hacen las madres con sus bebés, los investigadores esperan examinar si el efecto de mecer es similar en períodos más prolongados de sueño, y averiguar si puede ser utilizado como método para ayudar a aquellos que sufren de insomnio.