Practicar ejercicio de resistencia extrema, como el entrenamiento para un maratón, puede afectar al corazón, revela una investigación realizada con 40 deportistas de alto rendimiento en Australia.
Después de analizar varias imágenes extraídas por resonancia magnética de un grupo de atletas que entrenan para participar en eventos como triatlones o carreras de ciclismo de montaña, los investigadores descubrieron que, en la mayoría de los casos, los músculos del corazón se habían estirado más de lo normal.
Aunque muchos de los deportistas se recuperaron completamente en una semana, cinco seguían mostrando heridas de carácter más permanente. Los investigadores explicaron en la revista European Heart Journal cómo estos cambios pueden causar problemas al corazón como arritmias.
Sus hallazgos no deben interpretarse como una afirmación de que el ejercicio de resistencia no es saludable. En la mayoría de los atletas, una combinación de entrenamiento razonable y recuperación debe provocar una mejoría en las funciones del músculo del corazón.
Es importante recordar que los beneficios de una actividad física están bien establecidos y aceptados. Los deportistas de alto rendimiento que han participado en este estudio estuvieron compitiendo en jornadas largas y después de entrenar durante más de 10 horas a la semana.
Los niveles de una sustancia química llamada BNP, producida por el corazón en respuesta a un estiramiento excesivo, habían aumentado.
Una semana más tarde, la mayoría de los corazones de los atletas recuperaron el estado que tenían antes de las competencias. No obstante, en cinco de ellos que entrenaron y compitieron igual que los demás, se observaron signos de cicatrización del tejido del corazón mientras que la función ventricular derecha había quedado disminuida en comparación con la lectura previa a la carrera.