Investigadores informan que la meditación y el ejercicio parecen reducir el tiempo de licencia por enfermedad en el trabajo. Una nueva investigación dirigida por el Dr. Bruce Barrett, profesor de medicina familiar en la Universidad de Wisconsin-Madisonen EUA, sugiere que el ejercicio regular o la meditación podrían estar entre las mejores formas de reducir las infecciones respiratorias agudas.
Un pequeño estudio de 149 adultos activos y sedentarios de 50 años y mayores comparó los efectos preventivos del ejercicio moderado y la meditación de atención plena sobre la gravedad de las infecciones respiratorias, tales como el resfriado y la gripe, durante una temporada completa de invierno.
Los investigadores encontraron que los participantes que iniciaban una rutina de ejercicio diaria tenían menos episodios de infecciones respiratorias y perdían menos días de trabajo.
Los investigadores también encontraron que las personas que hacían meditación de atención plena, que se centra en prestar atención al cuerpo y las emociones, estaban más protegidos contra las enfermedades.
El estudio aparece en la revista Annals of Family Medicine.
La meditación de atención plena puede reducir el estrés percibido y que el ejercicio puede funcionar a través de más vías fisiológicas [para mejorar] el sistema inmunológico.
El virus de la gripe se relaciona con cerca de 36,000 muertes y medio millón de hospitalizaciones cada año, las enfermedades causadas por otros virus, como el responsable del resfriado común, son culpables de los 40 millones de días que se pierden en el trabajo y la escuela cada año.
En el estudio participaron en su mayoría mujeres blancas que no hacían meditación o ejercicio moderado más de una vez a la semana. Se dividieron aleatoriamente en tres grupos: un tercio que no cambió sus hábitos, un tercio que comenzó un programa de ocho semanas de ejercicio moderado, como correr en una caminadora y montar en bicicleta 45 minutos al día, con sesiones semanales de entrenamiento, y el resto que invirtió la misma cantidad de tiempo en meditación de atención plena, que incluye yoga, estiramientos, caminar y otras actividades con un instructor y por su propia cuenta.
Los investigadores siguieron a los participantes durante una temporada de resfriado y gripe y les pidieron que llamaran ante la primera señal de enfermedad y que llevaran un diario con sus síntomas.
Durante la temporada, los resultados mostraron, que aquellos que meditaban tenían 27 episodios de enfermedad respiratoria aguda y un total combinado de 257 días de enfermedad; y los que hicieron ejercicio tenían 241 días de enfermedad y 26 episodios. En comparación con 40 episodios y 453 días de enfermedad de los que no cambiaron sus hábitos.
El grupo de meditación perdió 16 días de trabajo por enfermedad, el de ejercicio 32 días y el grupo que no modificó sus hábitos 67 días. Pero la diferencia en sí fue lo suficientemente grande para que la relación entre la meditación y el trabajo perdido se considerara significativa, de acuerdo con los requisitos estadísticos que los autores establecieron antes del inicio del estudio.
El estudio sigiere que los beneficios de la meditación y el ejercicio eran similares, cuando los individuos en el grupo de meditación caían enfermos, sufrían al parecer menos y se sentían enfermos durante menos tiempo.