La ONU a través de su vicesecretario general, Jan Eliasson, lanza en el Día Mundial del Agua, una campaña para intentar terminar con el mortal «tabú de los baños» y mejorar el acceso a un retrete para las 2.500 millones de personas que no lo tienen, y que es una causa importante de problemas de salud.
La iniciativa busca reducir la estadística de 3.000 niños menores de cinco años que mueren a diario por enfermedades a causa de la ingestión de agua no apta para el consumo, como el cólera o la disentería.
Existe un tabú en lo que concierne a los baños y la defecación al aire libre, comenta Eliasson, ya que es una práctica corriente para millones de personas en países pobres, obligadas a hacer sus necesidades al aire libre. Se puede imaginar la falta de dignidad de este acto, el riesgo de ser violada si se es una mujer o una joven cuando se sale a la noche, así como también el riesgo para la salud y el medio ambiente.
Uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio sobre la salud y la pobreza, establecidos en el año 2000, fue disminuir en un 50% el número de personas que no tienen acceso a baños con agua potable para 2015, ese objetivo está muy lejos de concretarse: al ritmo actual no se alcanzará hasta 2075.
La ONU quiere alcanzar en 2025 aquel objetivo marcado en 2000. El grupo WaterAid estima que 2030 es una fecha más realista, pero para cumplir con ello se requiere de una gran inversión de recursos económicos. Según Eliasson, los gobiernos deben gastar más en inversiones sanitarias y la construcción de baños debe ser una prioridad. También hay que educar a la población para evitar enfermedades.
Fuente: ONU World Water Day 2013