La decodificación del genoma del insecto, el vector de la enfermedad, permite idear nuevas técnicas de control y estudiar la interacción con el parásito causante de la enfermedad, el Trypanosoma cruzi, explica el investigador Rolando Rivera Pomar, del Centro Regional de Estudios Genómicos de la Universidad de La Plata en Argentina.
Los investigadores creen que si se logra establecer los motivos por los cuales el insecto transmite el parásito de la enfermedad, se pueden estudiar los mecanismos para inhibir esa acción.
Rivera Pomar señala que el hallazgo, logrado tras casi diez años de investigaciones, permite completar el círculo sobre el mal dado que los genomas del humano y del parásito transmisor ya habían sido descifrados.
La decodificación del genoma del insecto, el Rhodnius prolixus, abre la posibilidad de encarar una lucha más eficaz al conocer más sobre el Mal de Chagas, que afecta anualmente a un millón y medio de personas.
Los primeros tratamientos están destinados a los pacientes atendidos en Argentina, mientras que en un futuro se enviarán medicamentos a EUA y España, en el marco de programas de cooperación.