La contaminación del aire en las ciudades se convertirá en la causa mayor de muerte prematura en las siguientes décadas, desplazando a la carencia de servicios sanitarios y el agua contaminada, de acuerdo a un reporte reciente.
El factor de la contaminación afectará por igual a todos los países, sin distinción de desarrollo, y alrededor del año 2050 se calcula que 3.6 millones de personas perecerán por año a causa de la contaminación del aire, la mayoría de ellos en China y en India. Sin embargo, los países del primer mundo sufrirán estos efectos principalmente debido a la pérdida del ozono, que afectará a la población de adultos mayores quienes son más susceptibles.
El aviso de alerta se incluye en el nuevo reporte de la OCDE (Organización para el Comercio y el Desarrollo Económico), un estudio del medio ambiente global que intenta cubrir hasta el año 2050. El reporte centra su preocupación en cuatro áreas: cambio climático, pérdida de biodiversidad, agua y los impactos en la salud debido a la contaminación.
En caso de persistir las políticas actuales, el planeta excederá por mucho el nivel considerado como crítico de emisión de gases invernadero, considera el reporte.
Si el fallo en usar nuevas y más limpias formas de energía persiste, las emisiones de gases invernadero se incrementarán más del doble. La demanda de agua va igualmente en aumento y para el año 2050 alrededor del 40% de la población vivirá en áreas con escasez severa de agua. El agotamiento de los recursos de agua subterránea será la mayor amenaza para la agricultura y el suministro urbano de agua, al tiempo que la contaminación a partir en las aguas residuales, incluyendo los químicos utilizados para limpieza, hará más difícil la situación.