Un estudio llevado a cabo por la Dra. Lorrene Ritchie de la University of California, en Berkeley, EUA, demuestra que las niñas que comen varias veces al día engordan menos y suman menos centímetros a su cintura en una década que las que lo hacen sólo en dos ocasiones diarias.
La hipótesis es que la comida y los «snacks» en porciones más pequeñas y frecuentes prolongarían la sensación de saciedad y evitan los excesos alimentarios.
Es posible que comer porciones más pequeñas o con intervalos más cortos reduzca la necesidad de ingerir comidas copiosas o la sensación de hambre, comenta la Nutrióloga Alison Field, experta en alimentación infantil del Hospital de Niños de Boston.
Aun así, existe la posibilidad de que las personas que comen con frecuencia sean simplemente distintas a las que deciden comer un par de veces al día.
El estudio de la Dra. Ritchie surge de los datos de un estudio realizado con fondos públicos sobre niñas negras y blancas de Berkeley, Cincinnati y la ciudad de Washington.
Cuando las niñas tenían 9 y 10 años, registró qué comían y a qué hora lo hacían durante varios días por vez, luego se reviso esa información con nutricionistas.
En los 10 años posteriores, les controló la altura, el peso y el perímetro de cintura a las más de 2.100 participantes.
Los autores utilizaron esos registros para comparar la cantidad de comidas y snacks que las participantes comían al inicio del estudio con las variaciones del peso y el tamaño de la cintura a los 19 y 20 años.
Al principio, las niñas comían alrededor de 2,5 comidas y 2,5 snacks diarios, independientemente del intervalo entre las comidas, las participantes aumentaron de peso y de tamaño de cintura durante la pubertad. Pero a menor cantidad de snacks y comidas al día, mayor cantidad de grasa acumularon durante el estudio. El estudio se publico en la revista American Journal of Clinical Nutrition.
En una década, las que comían más de seis veces por día aumentaron 6,5 puntos de índice de masa corporal (IMC), comparado con 7,8 puntos en el grupo que comía tres veces o menos por día. Eso se traduce en unos 3,6 kilogramos (kg) extra en las participantes con más intervalo entre las comidas.
Las chicas que comían con más frecuencia tenían 10 centímetros (cm) más de cintura a los 19 o 20 años, comparado con casi 13 cm en el otro grupo, aun tras considerar factores como el ejercicio, el tiempo frente al televisor y el peso inicial.. La clave, es la moderación.
Fuente: American Journal of Clinical Nutrition