Estudios de la Universidad del Este de Illinois, Estados Unidos a cargo del Dr. James Painter, revelaron los beneficios de comer pistaches, una fuente rica de antioxidantes.
Además, si los pistaches tienen cáscara, el alimento tendrá un efecto psicológico que nos hará sentir que estamos llenos. Los investigadores llevaron a cabo dos experimentos. En el primero participaron 140 estudiantes universitarios que fueron divididos en dos grupos: uno debía comer pistaches con cáscara durante sus clases y el otro pistaches sin cáscara.
A cada uno de los estudiantes se le dio un recipiente con su porción de pistaches antes de cada clase, la cual fue pesada antes de entregársela.
Cuando los estudiantes salieron de las clases debían entregar sus recipientes y los investigadores llevaron un registro del peso total y la cantidad de calorías que los estudiantes habían consumido.
Los resultados mostraron que los del grupo de frutos con cáscara consumieron en total 125 calorías, mientras que el otro grupo comió 211 calorías, una diferencia de 41% menos calorías en el primer grupo.
Aunque es obvio que pelar un pistache mantuvo ocupados a los estudiantes y por lo tanto comieron menos, los científicos afirman que hay otra explicación para este menor consumo de frutos secos.
Para comprobar el papel que juegan estas cáscaras vacías llevaron a cabo un segundo experimento con otro grupo de 118 participantes,personal y profesores de una universidad, a quienes se les dio un recipiente con pistaches previamente pesados.
Se les dijo que durante los próximos tres días debían mantener sus pistaches en su escritorio mientras trabajaban y podían comer todos los pistaches que quisieran, con excepción del segundo día donde no podían comer ningún pistache.
También se les dio un recipiente vacío donde debían desechar las cáscaras de los frutos secos consumidos. Estos hallazgos demuestran que los pistaches, siendo uno de los pocos frutos secos con cáscara, nos ayudan a disminuir la velocidad con que consumimos. Pero además, las cáscaras vacías nos ofrecen una clave visual que nos ayuda a comer menos
Los científicos dividieron al grupo en dos. Durante el primer día del experimento los investigadores no vaciaron el recipiente de las cáscaras desechadas por el primer grupo, pero las del segundo grupo fueron desechadas cada dos horas.
Al mismo tiempo volvían a llenar los recipientes con pistaches frescos.
Cuando compararon los registros de lo que había consumido cada grupo los resultados mostraron que los participantes que tuvieron durante todo el día las cáscaras en su escritorio comieron 22% menos pistaches que aquéllos a quienes se les vació el recipiente cada dos horas.
Estos hallazgos demuestran que los pistaches, siendo uno de los pocos frutos secos con cáscara, nos ayudan a disminuir la velocidad con que consumimos, afirma el Dr. Painter, quien dirigió el estudio.
De hecho, ya se ha acuñado un término: «Principio del Pistache», para describir una técnica simple que pueda ser utilizada para engañarnos a nosotros mismos y comer menos, comenta el científico.
Y si no funciona este engaño no habrá nada perdido, al contrario. Consumir pistaches de cualquier forma es bueno para la salud. El estudio se publicó en Journal of Nutrition.